Aprende a saber lo que te “dice” tu bebé
¿Conoces Otakulandia?
Cuando tenemos un bebé y somos primerizos (papás y mamás, aquí os meto a todos 😀 ), no tenemos ni la menor idea de lo que nos quiere decir cuando llora o gime o hace gestos con la carita o el cuerpo entero. ¡Qué difícil nos resulta entender sus necesidades! Pero queridos y queridas, es como todo… de una u otra forma, al final iréis aprendiendo a comprender sus “mensajes” y así os resultará más sencillo darle lo que necesite en cada momento de su vida, sobre todo durante los primeros 4 o 5 meses, son los más complicadillos, pero no os preocupéis, todos los papás y mamás del mundo hemos pasado por ésto y terminamos siendo unos “masters del universo” en la comprensión del complicado sistema de comunicación de nuestros peques 😀
Os voy a dar unas indicaciones que podrán ayudaros a discernir si vuestro bebé quiere una u otra cosa o si llora por ésto o por lo otro… Tomad nota, porque de verdad que os ayudarán 😉
- Cuando un bebé se siente solito llora de forma que os acerquéis a él y que lo cojáis en brazos. Suele gritar unos segundos y después se calla con el fin de que os deis cuenta de lo que os está reclamando. Lo repetirá hasta que consiga lo que quiere, ya os aviso 😀
- Cuando le duele algo llora de forma más fuerte y cuando le arrecia el dolor, gritará de forma más histérica. Casi siempre se debe a los cólicos (puñeteros) de aire, tened en cuenta que tanto si mama como si toma bibe tragará aire, inevitablemente, y no todo se elimina cuando eructa. Os dejo una tabla para que le ayudéis con masajitos estupendos a eliminar las molestias en su tripita, que tanto le duelen y que no le dejarán descansar en muchas ocasiones. Ni a él ni a vosotros.
- Si el llanto es persistente pero más silencioso, como una retahíla, puede que esté malito con algo de fiebre. Tomadle la temperatura y si es necesario, seguid las indicaciones de vuestro pediatra.
- Cuando vuestro bebé tiene hambre comenzará con el llanto de “llamar la atención”, pero ya os podéis dar prisa porque seguirá y seguirá hasta convertirse en un llanto que os abrumará porque es histérico… Es más, si lo habéis cogido pero no le dais de comer ¡no os lo perdonará! 😀 y seguirá llorando hasta que consiga su objetivo. Podéis saber si es hambre poniéndole cerca de la boquita un chupete o la tetina del bibe… si succiona con ansia y se calla ¡¡no hay duda!!… Y puede que penséis que aún no es la hora pero si el tiene hambre… no hay nada que hacer salvo darle de comer. Los bebés comen cuando tienen hambre, no se rigen por un control o un horario según las tablas de alimentación. Cada bebé es como es, los hay más tragones y otros a los que las “dosis indicadas” les sobran por todas partes. Lo importante es que se queden tranquilos después de comer y que cojan peso semana a semana.
- En ocasiones os volveréis majaretas, porque os daréis cuenta de que no le duele nada, no tiene hambre, no tiene sueño y sin embargo… llora. Será más parecido a que se está quejando, por lo que podrá chillar de vez en cuando y ésto se deberá a que está incómodo con su pañal. No sólo se encuentran molestos cuando hacen sus cacotas, el pipí puede resultarles igual de desagradable e incluso, la eliminación de gases les puede fastidiar tanto como para lloriquear.
- Como a los adultos, a veces al bebé le resulta incómodo estar de la misma postura mucho rato y eso puede darle pie a llorar para que le entendamos y le cambiemos de postura. Este llanto será intermitente e irritado y lo acompañarán movimientos como arqueos, intentos de giro y patadas y brazadas. Revisad el pañal, observad si tiene frío o si por el contrario, tiene calor… puede incluso que haya algo que le roce o le apriete de lo que lleva puesto. Pensad que no sabe comunicarse de otra forma, pero ya os digo que si estáis atentos, le entenderéis a las mil maravillas 😀
- El bebé tiene sueño y su llanto se convierte en algo monótono al principio, después de un ratito si no ha podido quedarse dormido porque “se le ha escapado el momento del sueño” ¡podéis prepararos para bailar con él en brazos! 😀 … Se nota cuando un bebé tiene sueño porque suele intentar frotarse los ojitos o agarrarse del pelo o de las orejitas… Todo su cuerpo le está pidiendo dormir, pero… por cualquier motivo no lo consigue. Pensad que hasta el cuarto o quinto mes no le veréis bostezar muy a menudo, dado que los nenes durante todo ese tiempo todavía no respiran por la boca… pero si que harán el gesto y los ojitos les delatan… Yo les llamo “ojitos de mapache rojo”… vaya que lo notaréis seguro 🤣
¡¡No os asustéis, por favor…!! Ya os digo que no es tan complicado y que aprenderéis rápidamente a “traducir su código secreto” 😀 … Otra cosa que deberéis tener en cuenta es que también pueden llorar sólo porque están hasta las narices de ver el mismo entorno. No importa que no definan bien las cosas, saben que están en un sitio mucho rato y se aburren o se frustran. Por lo que con cambiarles del dormitorio al salón, habréis conseguido lo que quería y se tranquilizará.
Y de momento, lo dejamos aquí… no quiero hartaros ni asustaros más de lo que ya estáis. Un abrazo grande y pensad que los bebés crecen de un día para otro, en breve estaréis recordando todos sus momentos (buenos y malos) con una añoranza difícil de expresar. ¡Snif…!